10 Sep La vivienda es más cara ¿por qué?
El precio de la vivienda sube y sube, concretamente, un 5,6% a nivel nacional respecto al año anterior, según el Instituto Nacional de Estadística. El segundo mayor incremento desde el boom inmobiliario. Esta subida de precios se equipara a la de los primeros tres meses de 2016 donde se alcanzó un crecimiento del 6,3%. Si miramos más de cerca, el precio de los inmuebles de segunda mano van a la cabeza dado que se reduce la oferta, el porcentaje de encarecimiento es del 5,8 %. Por otro lado, la vivienda nueva eleva sus precios un 4,4%.
Pero ¿a qué se debe este subidón? Este incremento de precios va ligado a los elevados precios que están experimentando Madrid y Barcelona, donde la vivienda se ha incrementado un 10,9% y un 9,3 % respectivamente. Estas dos ciudades llevan la batuta del mercado inmobilario español. Alejadas de los precios de las otras comunidades autónomas reactivan el mercado inmobiliario español.
La Comunidad de Madrid y su capital ha sido la región española en alcanzar las dos cifras de incremento en el precio de la vivienda, llegando a un 10,3 %
Sus indicadores que rondan el diez por ciento se asemejan a los experimentados durante la época del boom. Sin embargo, las cifras siguen estando muy alejadas de los precios y la inestabilidad de entonces. Por ejemplo, aún no se genera suficiente vivienda nueva y queda stock en muchas zonas en proceso de recuperación. Por ello, debemos traducir estos datos en confianza en el mercado inmobiliario.
Todas comunidades autónomas presentan tasas positivas de crecimiento, excepto Asturias. Las que lideran el mayor aumento son Madrid, Cataluña y Baleares con un 7,4% de incremento. En la Comunidad Valenciana, parece que el crecimiento se centra en Valencia y Alicante. Sin embargo, Castellón presenta zonas en estancamiento y con demasiado stock.
Valencia es una de las ciudades en la Comunidad Valenciana donde mayor valor está acumulando la vivienda.
A pesar de la carrerilla que ha tomado el mercado inmobiliario. A muchos inversores les preocupan los precios de las dos capitales españolas. Sin embargo, Madrid y Barcelona tienen unos precios muy alejado de los valores que alcanzaron durante 2007.