08 Mar Decorar, sin comprar: 10 trucos para no aburrir tu casa
Decorar, sin comprar. Dar un cambio de aires a una casa no tiene por qué ser ni complicado ni caro. Con unos pequeños trucos, puedes hacer tu hogar más amenos. Con una decoración sobria y simple, cualquier novedad en las habitaciones puede cambiar el foco de atención. Si no tienes tiempo para pensar en grandes cambios y no cuentas con un gran presupuesto, lo mejor es que despejes el espacio, te quedes con lo necesario y hagas pequeñas innovaciones a tu alrededor.
Cambia las cosas de sitio. Aunque parezca absurdo, una silla de tu habitación puede lucir como un mueble totalmente nuevo en el salón. Una lámpara, un jarrón o un taburete puede lucir completamente distintos dependiendo de la luz y el espacio en el que encuentren Echa un vistazo a los objetos y muebles de otras habitaciones para tomarlos prestados.
Iluminación. La luz de una vivienda puede cambiar la percepción que tenemos de ella. Además, inconscientemente nos movemos alrededor de las luminarias. Intenta añadir una lámpara para leer en tu habitación: adquiere nuevos hábitos y hazla más acogedora.
(foto de Eleni, My Paradissi)
Recupera algo viejo. No hay que pasarse con las antigüedades. Sin embargo, un sillón de cuero o banqueta pueden ser un contrapunto muy agradable.
Plantas. Las plantas aportan vida al hogar. Llenan el espacio y cuidar de ellas puede ser una distracción para tu casa. Arriésgate con grandes plantas de interiores para aportar personalidad y alegría a tu hogar.
(foto de María, Dr. Livinghome)
Fotos y recuerdos. Un toque personal siempre está bien. Los recuerdos sobre días especiales o vacaciones se pueden renovar periódicamente. Por eso, escoge una pared, pon algunos marcos y cambia las fotografías de vez en cuando.
(foto de Artifact Uprising)
Se ingenioso. Explota tu creatividad. Dibuja, pinta o escribe algo en un papel en blanco y ponle un marco sencillo. De este modo, tus pequeñas obras lucirán como nunca. Si no eres muy habilidoso con tus manos, juega un poco con Photoshop o busca imágenes gratuitas en la red.
Libros. Lo que leemos dice mucho de nosotros. Si tienes una buena colección en casa, exponla en tu salón. Los libros son, por sí mismos, piezas muy bonitas.
(foto de Dwell)
Despeja el espacio y sé más selectivo con la lectura. Si eres alérgico al polvo, olvídate de crear una biblioteca. En cambio, despeja las paredes y escoge una buena revista o catálogo para colocar encima del mostrador o la mesita. Hazte el interesante.
(foto de Kinfolk)
Saca del armario algo bonito. Un kimono, unas botas tejanas o un sombrero tienen una belleza muy particular. Por ello, saca del armario aquellos objetos de tu día a día y exhíbelos junto con tu mobiliario.
(foto de ShopStyle)
Trae visitas. Normalmente, cuando nos movemos en casa lo hacemos siempre con el mismo patrón. Con unos invitados, puedes averiguar fácilmente qué molesta o qué necesita tu casa.