03 Jul ¿Por qué sube el precio de los alquileres?
El precio de los alquileres está cada vez más alto. ¿De quién es la culpa? El mercado del alquiler está en ascenso. Arrendar una vivienda para vivir es la opción más viable. De hecho, los españoles empiezan a considerar el alquiler como la mejor opción para vivir actualmente. La media de ciudadanos en alquiler en España se está equiparando a la de nuestros vecinos europeos, según las cifras de Fotocasa sobre el ejercicio de 2016. En cambio, el aumento en el precio de los alquileres en muchas comunidades autónomas están ligados a un crecimiento estacional. ¿Los altos precios del alquiler son culpa de los turistas?, te preguntarás.
Los pisos turísticos influyen en el mercado de alquiler, pero no son la única razón por la que suben los precios.
La perspectiva de los inquilinos va en esta dirección. Se cree que la sustancial subida de precios va ligada a la demanda de pisos turísticos. Un estudio de Fotocasa desvela que el más del 50% de las personas han indagado en el mercado o están alquilados y han llegado a esta conclusión. Además, demuestra que hay una percepción de que está influyendo a la oferta de vivienda residencial de alquiler.
Es verdad que el alquiler residencial se ve influido fuertemente por la demanda turística. Los precios aumentan. Pero, la subida del 10,5% interanual que ha experimentado la vivienda para alquiler en nuestro país tiene una explicación mucho más compleja.
Ciertas zonas de las grandes ciudades o costas españolas están totalmente condicionadas por la demanda turística.
La realidad es que muchos caseros han tenido que renegociar el precio con los inquilinos. No han querido desaprovechar la oportunidad que está brindando el mercado inmobiliario. En realidad, el alquiler en nuestro país siempre ha estado visto con malos ojos. Actualmente, es la mejor opción para el inversor dado que ofrece más rentabilidad que otro producto financiero. De todos modos, un estudio reciente ha apuntado que, a pesar de todo, el alquiler en nuestro país se encuentra por debajo de la media europea de precios. Esto se debe al gran incremento en determinadas ciudades que acaparan mucha demanda y poca oferta residencial.